ZAPATER Y GARRIDO HACEN LAS MALETAS DE NUEVO

De un tiempo a esta parte se ha convertido en habitual ver jugadores españoles por las diferentes ligas europeas, desde las de máximo nivel a otras de menor «relevancia». No sólo se enriquece el fútbol de los jugadores ‘emigrantes’, también el de las competiciones que disputan y por supuesto el fútbol español. Por tanto es agradable ver que jugadores como Zapater o Garrido tienen que volver a hacer las maletas para dejar sus equipos y se marchan a otros clubes extranjeros.

Lo sé, una entrada de corte sencillo y típico para un texto de estas características. Pero me ha resultado interesante ver cómo con 24 horas (o menos) de diferencia dos jugadores de cierto nivel que ya actuaban en el extranjero se deciden a seguir sus carreras en diferentes ligas sin hacer una parada previa en la Primera División española.

El cambio de ambos viene motivado por diferentes razones pero los dos casos manejan una semejanza. En el caso del futbolista guipuzcoano se ve obligado por la situación de ver como llega un nuevo lateral zurdo al Man City (Kolarov) tras una temporada en la que apenas había sentido el verde del City of Manchester bajo sus botas. Las señales que Mancini le ha mandado son claras: o te buscas la vida o aquí vas a seguir sin rascarla.

Llega a una Lazio que lleva varias temporadas inmersa en una reconstrucción constante, con contínuas idas y venidas de diferentes futbolistas y donde se encontrará con otro clásico de la Liga BBVA como Lionel Scaloni. Seguro que sale perdiendo económicamente pero las posibilidades deportivas son más positivas, aunque en Italia no regalan nada y deberá retocar ciertos aspectos de su juego para hacerse con el puesto de habitual en el lateral zurdo.

Zapater en cambio ha sido incluido en una operación de ‘trueque’ donde el recala en el Sporting de Lisboa mientras Miguel Veloso hace lo propio en un Genoa que además incluirá entre 8 y 10 millones de euros en la operación. Con la llegada del portugués sus opciones de ser un clásico del once ‘zena’ disminuían así que la operación es buena para ambas partes.

Además, el año pasado no fue del todo bueno para el ex de La Romareda. Aunque empezó muy fuerte y de hecho fue decisivo en el primer encuentro de la campaña, una lesión le hizo perderse varios encuentros y luego le costó volver a hacerse con el puesto en el centro del campo titular genovés. Llega a una Liga Sagres de menor potencial que el Calcio italiano pero donde podrá disputar competiciones europeas y donde seguro se hará fuerte e importante en la medular lisboeta.

Dos jugadores que en diferentes situaciones se han visto unidos por la ‘obligación’ de cambiar de aires si no querían ver su carrera estancada. Habrá que ver cómo les sale la jugada pero a priori la situación mejora para ambos sustancialmente. Y si no siempre les quedará la opción de volver a casa.

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